“No me costó volver porque nunca dejé de entrenar”
Celia Tejerina, clasificada para los Juegos Olímpicos en la categoría RS:X, dio detalles de su preparación en medio de la pandemia por coronavirus.
Durante una entrevista con el medio de la provincia de Mendoza “Numeral Deportivo”, Celia Tejerina de la Selección Argentina de vela y clasificada a Tokio en la categoría RS:X, contó detalles de su preparación rumbo a los Juegos Olímpicos.
“No me costó volver porque nunca dejé de entrenar. Lo más difícil fue cuando llevábamos mucho tiempo encerrados y se venía el frio, ahí tuve que ser un poco más fuerte de cabeza. Desde el día uno, intenté ser positiva y aprovechar todo lo que estuviera a mi alcance. Entrené la parte física en mi casa, y ahora que podemos salir un poco más, aprovecho la posibilidad de navegar”.
“La postergación la tomé con mucha tranquilidad y calma. Me ayudó mucho de que se comenzó a hablar este tema con mucho tiempo para poder ir procesándolo. Al principio me parecía algo imposible. Cuando llegó la cuarentena a Mendoza, me di cuenta de lo que estábamos viviendo. Me pareció lo más oportuno y sensato”.
“Espero dar mi mejor versión y poder sentirme en óptimas condiciones porque es una cancha muy técnica. Espero poder desarrollar la técnica de ese mar que es tan específico. Quiero estar entre las quince mejores. Espero poder cumplir. Es un año con mucha incertidumbre en cuanto a competencias, porque para nosotros es muy importante competir antes. En mi cabeza está dar lo mejor de mí”.
“No sé si fue la misma emoción que los primeros, pero fue una satisfacción muy grande. Es conseguir otro logro, algo por lo que trabajé mucho con el apoyo de toda la gente que me acompaña. Va de la mano con la gratitud y la satisfacción personal. El momento que clasifiqué a Tokio fue distinto, ya que para Rio completé un selectivo”.
“La medalla de plata en los Panamericanos de Lima 2019. Ese momento fue muy especial para mí porque, principalmente, fue muy linda la sensación de festejar a nosotros como competidoras. Cuando terminamos la medal race, nos abrazamos, nos tiramos al agua. Fue una satisfacción muy grande haber conseguido la medalla de plata para mí, pero mucho más el poder compartirla. En ese momento, lo hice con mis amigas, competidoras, con todo el equipo de vela, con mi familia, mi novio, que me habían seguido todo el campeonato. Fue muy lindo porque lo tomé como una medalla para todos”.